Cateterismo
El cateterismo se realiza en el laboratorio de hemodinámica por personal sanitario especialmente cualificado. Se realiza estando el paciente en ayunas, consciente aunque sedado y tumbado.
Se le aplica anestesia local en la zona de punción -la ingle o el brazo- para que la exploración no resulte dolorosa. Se introducen catéteres –tubos de plástico muy finos, largos y flexibles- a través de las arterias y venas de la zona, dirigiéndolos hasta el corazón mediante control por radioscopia. Una vez allí se miden las presiones desde su interior y el flujo sanguíneo. Se inyecta un contrate con iodo para conocer el tamaño y la forma de las cavidades y el estado de las válvulas y arterias coronarias.
Molestias
En la zona de punción puede notar pequeñas molestias por la manipulación. Durante el procedimiento puede notar palpitaciones por los catéteres o tras las inyecciones de contraste puede notar calor en la cara y extremidades.
Riesgos
Existen los riesgos propios de un cateterismo convencional como reacciones alérgicas al contraste y arritmias por el paso de catéteres a través del corazón. La complicación más frecuente es la aparición de un hematoma en la zona de punción. En uno de cada mil pacientes puede ocurrir alguna complicación importante en la zona de punción. Las complicaciones severas son más frecuentes en pacientes obesos o con problemas de coagulación. Las complicaciones más importantes pueden necesitar transfusión de sangre y en raras ocasiones reparación con cirugía vascular.
Contraindicaciones
Debe comentar con su médico cualquiera de las siguientes situaciones para modificar a preparación de la prueba:
- Alergia al iodo o al pescado, marisco.
- Insuficiencia renal.
- Toma de medicación que afecte a la coagulación de la sangre.
- Toma de medicación para la diabetes.